Envío el breve comentario sobre el evangelio de este domingo:
"EL ANUNCIO del CAMBIO"
Como siempre, es sólo una sugerencia inicial, para que se pueda elaborar un comentario colectivo, con la experiencia y la reflexión de cada uno. Cada uno puede intervenir y aportar, si quiere y cuando quiere, sus opiniones y reflexiones, que luego serán enviadas a todo el grupo.
Abajo el aporte-retorno sobre el evangelio del domingo pasado:
“CUIDA la CASA”.
Un abrazo.
Bernardino
"El anuncio del cambio"
Hay fenómenos históricos...
que se manifiestan de repente y cambian profundamente el camino de la sociedad. Los que no son más tan jovencitos, pueden haber vivido algunos de estos momentos, tal vez sin haberlos claramente previstos, aunque confusamente deseados. Es lo que nos pasó, hace cincuenta años, con el Concilio Vaticano II, cuyo anuncio sorprendió a todos, pero después no fue difícil estudiar los antecedentes y descubrir cuántas energías y cuántos sufrimientos lo habían preparado.
Lo mismo ha pasado con Jesús. El evangelio de san Marcos, que fue el primer intento de presentar la enseñanza de Jesús en forma orgánica, busca los antecedentes de su manifestación, y encuentra que ya los profetas Malaquías e Isaías habían anunciado a un mensajero que había de preparar el camino del Mesías.
Así comienza el evangelio de san Marcos 1, 1-8:
2do DOMINGO de ADVIENTO 2011
Comienzo de la Buena Noticia de Jesús, Mesías, Hijo de Dios. Como está escrito en el libro del profeta Isaías:
«Mira, Yo envío a mi mensajero delante de ti.
para prepararte el camino.
Una voz grita en el desierto:
Preparen el camino del Señor,
allanen sus senderos».
Así se presentó Juan el Bautista en el desierto, proclamando un bautismo de conversión para el perdón de los pecados. Toda la gente de Judea y todos los habitantes de Jesrusalén acudían a él, y se hacían bautizar en las aguas del Jordán, confesando sus pecados.
Juan estaba vestido con una piel de camello y un cinturón de cuero, y se alimentaba con langostas y miel silvestre. Y predicaba, diciendo: «Detrás de mí vendrá el que es más poderoso que yo, y yo ni siquiera soy digno de ponerme a sus pies para desatar la correa de sus sandalias. Yo los he bautizado a ustedes con agua, pero El los bautizará con el Espíritu Santo».
“Comienzo de la Buena Noticia”...
que es el mismo Jesús. Estamos llamados no simplemente a compartir algunos conocimientos sobre Jesús, sino a establecer una profunda relación con él, que es la revelación de Dios, el Hijo, el cumplimiento de la larga espera de la humanidad. Este anuncio de fe es el aporte más propio del evangelio de Marcos. Mateo insiste mucho en el compromiso concreto de los discípulos de Jesús, pero personas que se portan bien, son solidarias y luchan por la justicia, por la defensa de la naturaleza, por el bien de todos, son sin duda personas admirables, inspiradas por grandes principios, mas pueden no ser todavía personas de fe en Cristo. La fe exige la adhesión a Jesús, una relación personal con él.
Para fortalecer esta relación, recordamos la voz de los profetas: “Preparen el camino del Señor, allanen sus senderos”. Era la invitación a crear las condiciones materiales y espirituales, para el regreso del pueblo de Israel del exilio, para su éxodo y su plena liberación.
En la voz de Juan el Bautista...
el precursor de Jesús, esta invitación adquiere una dimensión más interior. Al Bautista le interesa la conversión, el cambio de dirección de la vida, y por eso ofrece un bautismo para el perdón de los pecados. El cambio de vida hace posible el encuentro con Jesús, para realizar el nuevo éxodo, la liberación de todas las formas de esclavitud personal y social.
El Bautista hace su anuncio desde el desierto, lejos de la ciudad poblada de expertos de la Ley, sacerdotes, escribas y fariseos. Y la gente corre masivamente hacia él: “Toda la gente de Judea y todos los habitantes de Jerusalén acudían a él”. No corren al templo, sino al río Jordán, reconociéndose pecadores y para renacer a vida nueva.
Es el camino que Marcos indica para su comunidad. El desierto es una condición de pacificación interior, de liberación de ataduras y límites, liberación de la rutina y la repetición, para adquirir una mirada nueva y abrirnos a nuevos horizontes, a respuestas nuevas.
El encuentro con Cristo...
no será sólo el encuentro con el “más poderoso”. Será el encuentro con el Esposo, el Amado, como sugiere el Bautista con una imagen simbólica: “Yo ni siquiera soy digno de ponerme a sus pies para desatar la correa de sus sandalias”. No es una simple actitud de humildad. “Desatar la correa de las sandalias” en el Antiguo Testamento era el gesto de reapropiación del derecho del esposo. Con esta imagen el Bautista dice que no es él el esposo, y orienta a Jesús, el Esposo verdadero, que bautizará con el Espíritu Santo, para que sus discípulos y discípulas sean animados por el mismo Espíritu de Dios que lo anima a él.
TUS COMENTARIOS
SON IMPORTANTES
te esperamos en
Comentarios del DOMINGO pasado OSM 2011
Tiene razón en su reflexión... No es que nos llame el Señor a desconfiar. Sólo a estar mas atentos a nuestro interior, pensamientos y sentimientos que cada uno desarrolla. Somos concreadores con nuestro Padre y Madre. Por ello deseo seguir creando belleza y conectándome a la felicidad y abundancia, de la cual somos merecedores, por el solo hecho de ser Hijas e Hijos de Dios.
Mymiluz, Oruro – Bolivia
* * *
Estar prevenidos y despiertos frente a todas las tentaciones que se conocen, principalmente del dinero, el poder y los antivalores que cada día nos asaltan y nos alejan de la palabra del Señor. Pero cuando llega la hora de ver la realidad quisiéramos volver atrás. A veces pedimos olvidar los malos recuerdos. Entonces la enseñanza del evangelio nos dice: “Estén despiertos”. Ojalá cada día pudiésemos dar una mirada a nuestra vida y reclamarnos ser consecuentes con el amor del Padre.
Francisco, Oruro – Bolivia
* * *
El domingo 27 de noviembre hemos iniciado como Iglesia el hermosísimo tiempo de Adviento. Y tenemos, como cada año, cuatro domingos de Adviento. Es tiempo de espera y tiempo de preparación, antes de celebrar en la fiesta de Navidad, el nacimiento de nuestro Salvador Jesucristo.
Adviento es por excelencia tiempo de María. Ella está esperando el nacimiento de su Hijo de una manera única e incomparable. Ella está esperando al Hijo como madre. María está viviendo y llevando en su propio seno el gran misterio de un Dios que hace maravillas con la gente humilde y oprimida. María sabe de lo misterioso de la venida de su Hijo. Ella sabe de la obra insondable del Espíritu Santo.
María es la servidora de Dios, de este Dios que escucha siempre el clamor de su pueblo que sufre, este Dios que tiene entrañas de gran misericordia. El Dios que realiza sus planes de una manera inesperada y distinta de lo que muchas veces pensamos nosotros, hombres y mujeres de este mundo. El Dios que obra en plena libertad con el único poder que es el poder de su infinito amor y su perdón.
Estamos invitados todos y todas, a esperar, junto a María, el nacimiento de Jesús. Estamos invitados también a preparar nuestro corazón para tal inmensa alegría.
Pidamos a la Virgen María su intercesión para que aprendamos – seguramente poco a poco – a dejar a un lado todo lo que significa la ambición, todo lo que significa la búsqueda de ser importantes y de imponernos a los demás, todo lo que nos separa de Dios y de todos nuestros hermanos y hermanas. Que aprendamos a ser instrumentos dóciles como ella, útiles para la construcción del Reino.
Pidamos por su intercesión, la gracia de encontrar siempre en nuestras vidas algún camino para poder amar de verdad, sirviendo. Amar tal como nos enseñó su Hijo.
Gerardo, Oruro – Bolivia
No hay comentarios:
Publicar un comentario